miércoles, 27 de febrero de 2013

El Lado Bueno de las cosas, no hay más que decir.

Bien, veamos, un Domingo después de acabar los exámenes de Febrero, saboreando las mieles de justa victoria y pensando al mismo tiempo en si de verdad será o no "victoria" al final. Para evitar darle vueltas a la cabeza ( uno de mis principales defectos es lo que yo concibo como una conciencia "porculera" ) ,mi cabeza pulula al siempre bienvenido mundo del cine, a una película cuyo título y reparto me llamaron bastante en su época de promoción y que casualmente está actualmente en cartelera. ¿Nada mejor que hacer? En esta situación, lo dudo mucho, vamos que nos vamos...

En cuanto empecé a verla lo tuve claro, esto era un soplo de aire fresco para la industria del cine. Sí, y lo digo porque el género comedia-drama-romance está ya más que fundido, agotado y repetido. Su fórmula, reiterada hasta la saciedad empieza ya a cansarme, y sinceramente eso era lo que esperaba al entrar en la sala, sin embargo, una vez más mi intuición me jugó una dulcísima mala pasada. Señores, les hablo de la ahora tan comentada "El Lado Bueno de las Cosas", un drama romántico con muchísima comedia de por medio que relata la vuelta y re-inserción en la sociedad actual de Pat (Bradley Cooper), un profesor sustituto  de historia, que tras presenciar como su mujer le es infiel en la ducha con el profesor fijo de la misma materia, sufre su primer episodio violento que finaliza con él metido en un centro psiquiátrico. Pat descubrirá con ayuda de Tiffany (la cuñada de un buen amigo suyo) a lo largo de la película, que el destino no siempre transcurre por la misma línea, sino que puede dar tantos giros como éste quiera y acabar siendo la vida que no se esperaba y sin la cuál no podría vivir.


martes, 26 de febrero de 2013

Django Unchained (Desencadenado), una bestia parda

Pues sí, después de un goteo constante éste último mes, y sobre todo a partir de unas navidades de noticias y anuncios de premios  mayores y menores a los integrantes de la industria del cine, tanto en el viejo como en el antiguo continente, ya ha pasado lo fuerte. Los que amamos ese mundo los esperamos con ansia desde que comienza febrero: LOS OSCARS.


Y como corresponde a ello, un buen puñado de películas han hecho acto de presencia en los últimos meses, preparando la campaña de asalto a las nominaciones que unos cuantos afortunados, de toda esa marabunta del celuloide, han llegado a alcanzar. Bien, todo eso ya ha acabado ya sabemos los resultados de tanto esmero y dedicación. Ésta es ante todo una época en la que se ven grandes películas, grandes producciones, cuyo visionado es demasiado infrecuente a lo largo del año. Y qué queréis que os diga, es una época que yo particularmente aprovecho para pegarme el atracón de cine que no puedo pegarme durante los 365 días que se tarda en llegar de nuevo a Febrero.